Por: Mydalis M. Lugo Marrero
Ratificando el compromiso que asumió en el año 2006 con el Proyecto Guadarenas, un nutrido equipo de trabajo del Programa Sea Grant se reunió el pasado sábado, 19 de noviembre de 2011 en el Balneario de Boquerón, en Cabo Rojo. Estudiantes, maestros, líderes y padres se dieron cita al taller para formar parte de la conservación y del trabajo investigativo que se realiza en las playas del país. Guardarenas nació, en 1998, como parte de la iniciativa que tuvieron varios maestros y estudiantes en Trinidad y Tobago, para fortalecer la educación ambiental. Con el fin de concienciar sobre la importancia de preservar, de conservar y de promover un uso sustentable de las playas, Guardarenas incorpora a estudiantes, líderes comunitarios y maestros en el monitoreo directo de estos espacios públicos. Este ejercicio transforma la educación que reciben los jóvenes, además de que fomenta un enfoque interdisciplinario.
Luego de una breve introducción a Guardarenas, los participantes del taller procedieron a agruparse para tomar una orientación sobre uno de los cuatro temas a analizar: Calidad de agua, Perfiles de playa, Arena y Características de olas y de corrientes. La primera parte de este ejercicio estuvo compuesta por una charla, dirigida por uno de los educadores, y otra parte, en la que los participantes acudían al campo a poner en práctica lo aprendido.
Un cielo despejado, con un sol potente, una playa y una brisa tenue, reemplazaron el tradicional salón de clase para dar paso a una experiencia diferente y divertida. Maestros y estudiantes dejaron a un lado sus materiales escolares para apropiarse de un metro de viento, un nivel abney, una cinta métrica o una vara de alcance. Allí cernieron y clasificaron la arena, midieron la velocidad del viento, de la corriente del litoral y el periodo y la altura de la ola. Con rápida destreza, los participantes manejaron el nivel abney para realizar el perfil de playa. También, tuvieron la oportunidad de hacer pruebas de calidad de agua, para medir la temperatura, el oxígeno, los nitratos, los fosfatos, la turbidez y el pH.
Para finalizar el taller, los anfitriones resaltaron la importancia y el compromiso que asumía cada uno de los participantes al formar parte de Guardarenas. Delmis del C. Alicea Segarra, junto a Jorge “Chino” Casillas, miembros del Proyecto Guardarenas, destacaron la importancia de que cada grupo de personas, a las que se le entregara un equipo de trabajo (entiéndase los materiales antes mencionados) para monitorear una playa cuatro veces al año, reporte los datos científicos recopilados. Esto nos ayuda a entender la morfología y la dinámica de la playa, así como su constante evolución. Asimismo, esta información puede ser utilizada, eficientemente, para la toma de decisiones relacionadas a estos espacios y la formulación de política pública. Más que un compromiso con el Proyecto Guardarenas, estos participantes asumieron un compromiso con su ambiente.
Si desea conocer más sobre el Programa Guardarenas y sobre cómo transformar la experiencia de conservar el ambiente, puede acceder al siguiente enlace: https://seagrantpr.org/guardarenas